miércoles, 9 de noviembre de 2016

Juan José Millás: el articuento mudo

16/11/2016
Juan José Millás: el articuento mudo
17:00-17:30
Presentación de la obra de Juan José Millás.
17:30-18:15
Lectura y comentario (siempre grupal) del articuento “Viva el silencio”.
18:15-18:30
DESCANSO (hay una vinatería rica en la esquina de la sede)
18:30-20:00
Debate, apoyados por su participación en El País, Interviú, La Sexta o Cadena Ser.


Objetivos:

-Conocer la vida y la obra de Juan José Millás a partir de un relato representativo.
-Crear un diálogo entre la literatura y el periodismo.
-Ofrecer un espacio de debate abierto desde un texto (canónico o no).
-Vincular y delimitar los distintos géneros literarios, así como conectar y caracterizar tradiciones de España.

Contenidos:

-Obra de Juan José Millás (para posibles dudas o solicitudes).
-Relato “Viva el silencio”.

Metodología:

-Debate e intercambio de impresiones referidas al cuento, al autor y a su obra.

Tareas:

-Ofrecer textos y actividades de Juan José Millás.

A finales de octubre apareció en El País Semanal un breve apunte sobre una de las facetas más comentadas de Millás: la de diseccionar el revés de una fotografía cada domingo en el suplemento de El País. Otra de sus citas semanales es la del diario (sur)real "Papel mojado" de Interviú.  Los viernes a las 10 suele colaborar en "La ventana", de la Cadena Ser. Hay un foro en Facebook con más de 500 miembros donde constantemente se comparten sus últimos trabajos. Personalmente, y perdón por la anécdota, me da mucho gusto leer en tertulia a este autor que hace diez años veíamos en el instituto y que nos motivó a muchos a estudiar literatura. Para terminar, ahí va un video sobre el silencio, uno de sus temas, junto a la locura, la muerte, las realidades paralelas o simétricas... Millás es un personaje en sí para cualquier tertulia. Prueba de ello es su participación el 30 de noviembre en El café de las voces (Madrid). Maestro, ¿cuándo vendrás por Alicante? En el blog Carne de diván está el cuento que trabajaremos.


Os proponemos un juego, ligado a la sección "Imagen" que Millás nos ofrece cada domingo en El País Semanal, según comentábamos más arriba. A continuación viene una imagen. La idea es comentarla, analizarla, recrearla, interiorizarla... Y posteriormente podemos leer el texto y comparar el nuestro con el suyo o el de otros compañeros. ¿Vemos lo mismo en una imagen? ¿Qué detalles nos llegan más? ¿Cómo hay que leer una imagen?


Imagen del texto de Millás
Imagen del texto de Vicente

16 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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    1. JUANJO MILLÁS
      en serio (?) con BuenaFuente:
      https://www.youtube.com/watch?v=PxWouQJNIM0

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    2. Querido Vicente, muchas gracias por compartir la entrevista de Buenafuente. La última novela de Millás, Desde la sombra, es divertidísima, ¿verdad? La sombra es básica en toda su obra. Adjunto una charla que dio en Granada hace poco, sobre todo por la presentación de la profesora Ana Gallego Cuiñas, una maestra en la narrativa:

      https://www.youtube.com/watch?v=VY6RetFvS1w&t=2688s

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    3. Aunque trata de la sombra, Ana Gallego lo hace brillantemente.
      Gracias, Naxo
      (aunque ahora no se si seguir a Millás o a la propia Ana Gallego)
      ;)

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  2. Aquí va mi ejercicio de escritura sobre la imagen. Espero que nos animemos con este experimento antes de leer el texto "original" de Millás al respecto:

    TRES EN RAYA

    Todo es un juego. Vemos una ficha con forma de persona en un tablero urbano. Hay poco espacio y mucho tiempo, por lo que las líneas se superponen a juego con los vértices de los rascacielos. No hace falta ver dónde acaban estos. Son mucho más altos que las personas que van de un sitio a otro, cuyas siluetas se difuminan ante la cámara. Solo quien tiene seguridad para mirarnos a los ojos se define íntregramente. No vemos sus pies, pero deben de estar fríos; tampoco sus manos, quizá inquietas... Ante una ciudad vertiginosa, la calma entre rayas ofrece la ventaja del primer movimiento en la partida.

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    1. ¡Fantástico, Nacho! Me ha gustado especialmente la visión de la "ciudad vertiginosa", acelerada, y, por supuesto, la imagen del tablero humano, que me ha recordado a la obsesión de Borges por el ajedrez.

      Un abrazo y gracias por compartirlo.

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  3. http://elpais.com/elpais/2015/02/20/eps/1424456452_463345.html

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  4. La fotografía del cuento

    http://elpaissemanal.elpais.com/elpaissemanal40/las-mil-una-caras-la-fotografia/?id_externo_rsoc=TW_CM

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  5. Dejo aquí mi propuesta del juego:

    Somos la pausa cuando decidimos detenernos, contemplar, olvidar. Perder el rumbo en los ojos serenos, alicaídos. Despertar. Que no existan ni la ciudad ni el ruido. Somos las calles que he atropellado al despertarme esta mañana y la gente que no conozco, espectros detrás del objetivo de la cámara.

    Se me viene la muerte, pero no la estoy esperando, la saludo, con una sonrisa a medio camino entre el sarcasmo y el reto. No tengo alternativa: los gigantes de hierro, metal y cristaleras que me guardan las espaldas no podrán defenderme del presuroso encuentro. Estoy convencido, no obstante, de que ella también va con prisa, corriendo. Estará tan distraída con los fantasmas que me envuelven que ni siquiera reparará en mí, un hombre cualquiera, con las manos en los bolsillos.

    ¿Acaso alguien, hoy, se ha dado cuenta de que existo?

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    1. Gracias por regalarnos un texto tuyo, Ana. Nos camuflamos en la ciudad vertiginosa. Tu texto me recordó a la película El lado oscuro del corazón. ¿Quién habrá hecho la fotografía?

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  6. Esta es el texto sobre la imagen de Nieves Mata Duque:

    Se diría que este sujeto gris, de traje gris, cabello gris, está en calma, aunque detrás de él la incertidumbre avanza. Su pasado se desdibuja y se hace cada vez más cubista. Los colores se difuminan reducidos a una escala de grises. Las aristas amenazantes le persiguen. Las verticales se ciernen sobre él como lágrimas en una tormenta. Está a punto de ser atrapado por paralelas que le acucian.
    Probablemente usted, sí usted, la persona que está leyendo estas líneas, se ha encontrado alguna vez en la vida con alguien así, que no sabe lo que se le avecina. Pero si usted se fija un instante en esos ojos, bueno, en los ojos no, en esa mirada… ¿Qué mira?
    Él está mirando lo que tiene usted detrás, y le aseguro que lo que ve le resulta tan inquietante que no puede apartar la vista de ello.
    Haga usted sus propias conjeturas.

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    1. Lo que no se ve, como lo que no se escribe/lee en un cuento, atrae por los detalles que nos sugieren desde el otro lado, que es este. Muchísimas gracias, Nieve. En un rato ponemos el texto que escribió Millás sobre esta imagen.

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  7. Mi texto sobre la imagen:

    "Cuestión de artículos"

    "Schommer", ya caigo, después de 3 ojeadas, por fín recuerdo: este Sr. es fotógrafo. De apellido extranjero, Schommer, pero uno de los nuestros.
    Como gran fotógrafo, perdón, no "gran" si no "extraordinario" fotógrafo; aparece como no podría ser de otra forma en el lado de allá. Habituados a encontrar a estos profesionales detrás de la cámara, en un texto de Millás la realidad y la irrealidad se mezclan y podemos aparecer como lectores en cualquier lado.
    El otro fin de semana asistí a un taller de fotografía (de manos del también extraordinario fotógrafo José Benito Ruiz) y nos comentó una foto suya en la que apenas se apreciaba, por lo borroso y oscuro de la foto, la figura de un alce. Cualquiera haría lo posible (y lo imposible) por deshacerse de tal fotografía; intentaría no ser pillado con la foto entre manos pues delataría su torpeza e incompetencia de puro aficionado. Benito, sin embargo, nos mostró muy ufano esa fotografía como un trofeo de caza, y nos dijo que hubiera sido muy fácil haber tomado la foto nítida y con la iluminación correcta (y yo pensé que sería fácil ...para él) pero que en ese caso habría sacado a ese alce en concreto. Sin embargo, Benito al llevar la instantánea a la abstracción,había capturado "al" alce (como especie), en lugar de "un" alce (como espécimen).
    En la foto que nos ocupa, Schommer aparece queriéndonos decir (muy seriamente como se puede apreciar) que la foto no la ha hecho un aficionado; y que el desenfoque rozando la desaparición no es un defecto sino un efecto de la abstracción de ciudad que nos quiere transmitir.
    Las personas y los coches van y vienen, pasan; porque en la metrópolis, sus gentes y sus artefactos son temporales, pasajeros. Lo que permanece son sus edificios, ...y bueno, Schommer el artista, también; que con la paciencia de su quietud ha quedado inmortalizado (no en "esa" metrópolis, si no en "la" metrópolis).


    No se si me he explicado, ni siquiera si he acertado con el personaje, y si las líneas anteriores responden a una lógica efectiva y convincente, o por lo contrario se trata de un sinsentido febril como consecuencia del proceso gripal en el que me encuentro inmerso. Os pido disculpas en tal caso.

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  8. Qué buen análisis sobre el lenguaje de la realidad. Bendito estado febril! Aunque me da que tu texto no supera ese malestar que tanto persigue Millás. Que te mejores, Vicente. Y muchas gracias por compartir tu trabajo.

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  9. Muchísimas gracias por los textos millasianos sobre la imagen. Creo que hemos dado vida a un personaje (famoso o anónimo) y a un espacio. Adjunto el enlace y el texto del autor al respecto:

    http://elpaissemanal.elpais.com/columna/dos-pajaros-tiro/

    DOS PÁJAROS DE UN TIRO (Juan José Millás)

    HE AQUÍ un hombre que no ha recibido el Nobel de Literatura. Usted y yo tampoco, pero hay modos y modos de no recibirlo. Si te llamas Philip Roth y has escrito El lamento de Portnoy, no ganarlo es una forma de ganarlo. Nos explicamos. El Nobel de Literatura, no siempre, pero con frecuencia, premia al que se lo da y al que no se lo da. Al primero de forma directa y al segundo de manera inversa. Aunque resulta un poco confuso, es tal y como lo decimos. No hablamos de un accésit, ni de un segundo premio, nada de eso. No. Hablamos de un galardón con todas las de la ley, cuya única diferencia con el premio directo es la dotación económica. El Nobel Inverso no está dotado. ¿Pero quién piensa en el dinero cuando recibe un honor de tal calibre

    Gozan del Nobel Inverso, entre otros, Jorge Luis Borges, Julio Cortázar, Virginia Woolf, Graham Greene, pero también Juan Rulfo, León Tolstói, Kafka, Joyce o Italo Calvino. Les ha sido otorgado, en fin, a muchos escritores cuya lista nos quitaría, de tenerlo, el hipo. De hecho, siempre que se enumeran los premiados directos, se publica también la nómina de los inversos, que para algunos es más atractiva, y no solo por la calidad de su obra, sino por la gloria inherente al hecho de fracasar para que otro triunfe (véase La parte maldita, de Georges Bataille). Significa que para que Bob Dylan recibiera este año el Nobel de Literatura, era absolutamente preciso que no lo recibiera Roth. Lo curioso es que si lo hubiera recibido Roth, Dylan no habría recibido el inverso. Los suecos, qué listos, han vuelto a matar dos pájaros de un tiro.

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  10. Dejo en este "post", como cada semana, las recomendaciones de Miguel (siempre en el límite del tiempo):

    Libros:El fin de los libros y otros cuentos para bibliófilos, de Octave Uzanne.
    Historia de la literatura hispanoamericana, de Enrique Anderson Imbert.

    Frases abiertas a reflexión (tal vez en las últimas sesiones podamos comentar alguna):
    "Estoy siempre con los que tienen hambre, como Lorca. Y Lorca no se refería al hambre de comida, sino al hambre de libertad", Frederick Forsyth.

    "Se miente más de la cuenta por falta de fantasía: también la verdad se inventa", Antonio Machado.

    "Quien no alimenta sus sueños, envejece pronto", William Shakespeare.

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